PÁRADAIS: LA VIOLENCIA EN MÉXICO TIENE ROSTRO MASCULINO
Entrevista con Fernanda Melchor
“Una debe de seguir su intuición cuando una se refiere a la escritura, no estoy pensando en temas de moda o en programar fríamente mi carrera, simplemente escribo de lo que quiero.”
Desde hace ya varios años, la escritora Fernanda Melchor ha demostrado que tiene una pluma violenta, venenosa y viscosa, además de una mentalidad ácida, mordaz, y hay que decirlo, poderosa, lo hemos constatado en Falsa Liebre, Aquí no es Miami, Temporada de Huracanes y ahora también en su más reciente novela, Páradais.
Agresiva, provocadora, ambiciosa, morbosa y tremendamente violenta son los adjetivos que podríamos utilizar para definir esta nueva historia cargada de adrenalina y frenesí puro. Sobre la violencia marcada en sus libros, la finalista del International Booker Prize platicó para México Lector los porqués.
Siento que es una cosa a la que me ha empujado, mi propia experiencia de vida y mi propio desarrollo como artista, porque no puedo decir que yo tomé la decisión de hablar de estas cosas. Fue más intuitiva y orgánica, la violencia la conozco, la he vivido y la he experimentado, es decir, nací en los 80s con la crisis más grande que había existido. Tengo la impresión de que la gente de mi generación somos bastante escépticos y bastante cínicos hacia el futuro, como que los buenos tiempos siempre estaban atrás o hacia el futuro.
Cuando éramos niños pensábamos que cuando llegara el 2000 las desigualdades iban a acabar y que todos íbamos a ser felices y a encontrar la solución a muchos problemas sociales. Luego crecimos y nos dimos cuenta que no era así. Pienso que fue a partir del atentado del 9/11 en las Torres Gemelas, lo que nos marcó profundamente y nos hizo escépticos hacia el futuro.
Actualmente, Fernanda es reconocida como una auténtica feminista que es parte de una generación de escritoras latinoamericanas que están publicando novelas, ensayos, poesía y cuentos, en donde se está escribiendo con una valiosa aportación a la violencia de género.
Es muy interesante, el camino que yo he tomado, muchísimas mujeres escritoras de muchas generaciones, están contando sus historias, historias de mujeres, cosas interesantísimas con estilos muy personales. Me siento muy orgullosa de ser parte de una generación de mujeres latinoamericanas que están siendo publicadas. Tal vez yo he tomado un camino más lateral, tampoco es una decisión, creo que desde muy joven me ha parecido un misterio lo que habita dentro de la mente y el corazón de los varones.
Fui una chava que creció rodeada de hombres y que admiró a muchos hombres. Desde muy joven me he dado cuenta que la violencia tiene un rostro eminentemente masculino. Siempre he tratado de explorarlos a través de mis libros, poniéndome en la mente de estos hombres, jóvenes, muchachos. Uno debe de seguir su intuición cuando uno se refiere a la escritura, no estoy pensando en temas de moda o en programar fríamente mi carrera, simplemente escribo de lo que quiero y hasta ahora me ha interesado mucho este tema.
Uno de los personajes principales de esta nueva novela es Páradais, el escenario donde se lleva a cabo la historia y un sitio donde la desigualdad acecha y las clases sociales brillan. Acerca de este lugar, la escritora nos compartió los motivos que la llevaron a escribir esta novela.
Yo quería abandonar la idea de que exista una relación directa entre pobreza y violencia, creo que la violencia es una posibilidad humana y es parte de nuestra naturaleza. Cuando empecé a pensar en la historia de Páradais lo primero que surgió fue este fraccionamiento, y surgió porque empecé a ver cómo brotaban en Veracruz y Puebla. La gente siente esta necesidad de encerrarse en comunidades pequeñas o privadas con vigilantes y cámaras de seguridad ante el aumento de la violencia del narco y de los grupos organizados, pero también de la violencia cotidiana como el robo a casa-habitación.
Pensé, ¿qué tal si ahora tenemos una historia que suceda en un lugar privilegiado? En ese sentido es una novela muy veracruzana por los escenarios, pero también es una novela que podría suceder prácticamente en cualquier lado. Algo de lo que he estado reflexionando mucho es en la idea del mal, en la violencia como mal, en la violencia gratuita, como una suerte de perversión del humano.
Pienso en mi personaje, Franco Andrade, que está obsesionado con su vecina, pero es una situación malsana que se vuelve algo más morboso. En el caso de Polo, te das cuenta que su misoginia y machismo están muy presentes, y la única relación que este personaje puede tener con las mujeres es de dominación, pero como no lo logra porque todas las mujeres de su casa lo dominan, entonces busca revelarse. Estos personajes todo el tiempo son como espejos deformes, en ambos personajes anida la violencia al final de todo.
Breve reseña (Sin spoilers)
Páradais es un complejo residencial donde viven las clásicas familias pudientes con camionetas enormes, casas luminosas con bonitas fachadas y niñas y niños habitualmente rubios o castaños. Es un lugar donde vivirían importantes empresarias y empresarios, gente de la televisión, artistas y quizá hasta delincuentes de cuello blanco; obviamente en Páradais hay casetas de vigilancia, jardineros, personal de mantenimiento, carritos de golf y hermosas piscinas con chapoteadero. No sé si ya lo dije, pero también es un lugar muy, pero muy costoso.
Y es aquí donde se encuentran Polo y Franco Andrade, el primero es jardinero del lugar, el segundo es un residente, ambos adolescentes, ambos muy solos, ambos obsesionados, y ambos parásitos y peligrosos. Dos polos opuestos que se encuentran y se repelen, pero que se buscan una y otra vez para poder imaginar un mundo que les gusta, uno de fantasía donde el crimen es el eje conductor. Franco quiere cogerse a la vecina a cualquier precio, y Polo quiere ser alguien en la vida, como por ejemplo narcotraficante, esa es la premisa.
Bonus track
Cuando Fernanda Melchor publicó en su cuenta de Twitter que su próxima novela estaba a punto de salir a la venta, no les miento si me dio un vuelco el corazón y lo primero que vino a mi cabeza fue la incógnita si sería muy similar a la genialidad que leímos con Temporada de Huracanes ¿y saben qué? La respuesta es sí.