Cuando ves hacia el pasado pensando en ¿Por qué elegí el libro que elegí? Usualmente muchas respuestas pueden venir: lo encontré en una lista, alguien me lo recomendó, lo encontré en una pila de libros mientras descubrías una puerta a otro mundo buscando los libros más raros de tu librería favorita.
Los recuerdos hacen la realidad.
El policía Barry Sutton comienza a descubrir esto lentamente mientras investiga un suicidio en el que no logra salvar a la víctima que sufre de una extraña aflicción llamado Síndrome de Falsos Recuerdos -una misteriosa enfermedad que está afectando a personas con recuerdos de una vida que jamás vivieron.
En paralelo la neurocientifica Helena Smith cree es que nuestros recuerdos es lo más valioso que poseemos. Por ello ha dedicado su vida a crear una tecnología que nos permita conservar nuestro más preciados recuerdos. Si logra tener éxito cualquier persona será capaz de volver a vivir su primer beso, el nacimiento de sus hijos o el momento final en la muerte de un padre.
Mientras Barry busca saber cuál es la verdad se enfrentará cara a cara con algo que va más allá de una simple enfermedad – una fuerza que no solo ataca la mente sino la mismísima materia de la que está hecha nuestro pasado.
¿Qué les puedo decir sin espoilear la trama cuando ya he dicho demasiado? Básicamente nada.
El libro juega con conceptos simples pero los usa para darle vueltas, retorcerlos y llevarlos a extremos inimaginables. Lo que comienza como una historia de detectives, rápidamente se transforma en una travesía por la mente, la memoria y las ganas de sobrevivir.
Si estás preparado para una bomba que no se detiene ¿digo esto literalmente? Lo digo porque no pude dejar este libro por ningún momento así que lo terminé en dos días porque no lo podía dejar. Lo recomiendo porque seguramente ustedes tampoco lo podrán dejar.