D-503 es uno de los números más influyentes de la Ciudad de Cristal y Acero. Es el hombre que está Es el Constructor que diseñó, y el encargado, de El Integral; la apuesta más importante del Estado Único, con la que busca perpetuar el Poder y expandirlo a otros mundos. Un Mundo perfecto, en el que todos los números, sin importar su género, son completamente iguales ante la ley y los demás. Un mundo en el que, los sentimientos han sido erradicados, para que la lógica pueda gobernar, dictándoles todas sus actividades diarias y manteniendo un control total de los números.
El Constructor, D-503, es un número orgulloso de su Estado Único; una persona que, como todas las demás, disfruta de las construcciones de cristal, que permiten ver a tus vecinos en todo momento, la manera en la que la gente mastica al compás, y de las sesiones de sexo programado, indicadas por el mismo gobierno, con O-90. Como tarea de la construcción de El Integral, D-503 lleva un diario, en el que, en los minutos que el Estado asigna para el ocio, escribe la evolución de su trabajo y el amor que le profesa a el Gran Benefactor, líder del Estado Único.
En su diario, D-503 narra el momento en el que conoció a I-330, un número femenino, que lo cautiva gracias a su arrogancia y su manera de pensar. Poco a poco, ambos números inician una relación, aprovechando los cupones sexuales que brinda el Estado, misma que lleva a D-503 a cuestionarse la estructura político-social en la que viven los números, y adentrándolo poco a poco, en la Revolución que se aproxima.
Nosotros (en ruso, Мы, My), una novela escrita en 1924 por el autor ruso Yevgueni Zamiatin, en la que se retrata una sociedad distópica, en la que, un gobierno totalitario ha logrado acabar con la individualidad de los ciudadanos, quitándoles todos los sentimientos y emociones posibles; dejándolos a merced del Gran Benefactor. Un mundo en el que, el Yo, fue remplazado por el Nosotros, oprimiendo a todas las células que lo integran.
En su libro, Yevgueni Zamiatin señala y critica, de manera muy directa, el Régimen Soviético de Vladímir Ilich Uliánov, también conocido como Vladímir Lenin. En la novela, el autor bolchevique, muestra las intenciones de Lenin de instaurar un Gobierno Totalitario, en el que se controle a la población, y que busca expandir su poder e ideología, a través de acciones bélicas. Por lo mismo, Yevgueni Zamiatin fue encarcelado por el Partido Comunista (curiosamente había sido encarcelado por el Régimen Zarista debido a sus ideas comunistas) y su libro prohibido en la Unión Soviética, hasta 1988.
Por suerte, el manuscrito salió de territorio comunista, llegando a publicarse en Inglaterra, y posteriormente en otros países. Y, una de las personas que leyó la primera edición del libro fue George Orwell, quien se inspiró fuertemente en el mundo creado por Zamiatin para escribir la novela distópica, 1984. Además, este libro fue una fuerte influencia para otros autores, como Aldous Huxley (curiosamente el afirma que leyó el libro después de escribir Un Mundo Feliz, y que las grandes similitudes entre ambos son sólo una coincidencia), Ray Bradbury e, incluso, Alan Moore, quien escribió V de Venganza y Watchmen.
En Nosotros, Yevgueni Zamiatin nos presenta una versión anticuada del futuro, sin embargo, nos muestra, de manera muy directa, las consecuencias del hambre de Poder de muchos líderes mundiales, pasados y contemporáneos; llevándonos a cuestionarnos a dónde podríamos llegar, si las facciones de extrema izquierda o de extrema derecha, de los partidos políticos contemporáneos, llegan a tomar el poder. Además, es un libro muy entretenido, contado enteramente a manera de diario, que te atrapa desde las primeras entradas (o capítulos) del mismo, lo que lo hace bastante digerible y ameno. Es uno de esos libros que vale mucho la pena leer, para reimaginarte el futuro, adentrarte en el pasado y disfrutar del presente.